MENSAJE DEL DIA ( Entrega total )
Ya que todo aquel que invoque el nombre del Señor, será salvo .
MI mamá fue una veterana de la guerra británica, la matriarca de nuestra familia, una mujer inteligente. Pero mamá no conocía a Jesús como su Salvador personal. Creyó en Dios, pero tenía dificultad con el concepto de la divinidad de Jesús. «Creo que Jesús fue un gran profeta», decía, «pero, ¿el Hijo de Dios?».
Después del derrame cerebral de mi madre, ella luchó con muchos desafíos físicos. Me sentía profundamente apenada al ver a mi madre deteriorarse ante mis ojos. Más tarde vino a vivir conmigo. Le había prometido muchos años antes que cuidaría de ella y no la ingresaría en un asilo para ancianos. Por años había estado orando por la salvación de mi madre.
Tres días antes de que mamá falleciera, Dios hizo un milagro. Mamá entregó su vida al Señor, no a causa de lo que yo hubiera hecho o dicho. Alzó sus ojos al cielo y le pidió a Jesús que fuera su Salvador. Una paz perfecta prevaleció en las restantes horas de mamá en este mundo.
Dios nos ofrece a cada uno de nosotros/as salvación y vida eterna. La opción es nuestra.
Sra. Glynis M. Belec (Ontario, Canadá)